Por Iván Godoy Flores.
Desde que tuvimos la responsabilidad, como consultora, de elaborar la política regional de turismo de la Región de Arica y Parinacota para el periodo 2011 – 2015, fue válido, para comprender las políticas públicas, reflexionar sobre el concepto y la importancia de estas para el desarrollo de las regiones de Chile. A la luz de los últimos acontecimientos en Aysén, no es difícil descubrir la ausencia de políticas públicas que busquen de forma mancomunada resolver los problemas que son de pertinencia de los gobiernos regionales.
La Región de Arica no es la excepción, la elaboración de políticas públicas en sectores de la economía, del desarrollo social y del territorio pueden ser los grandes impulsores del desarrollo regional e importantes pasos hacia el logro de mayores niveles de descentralización política, administrativa y financiera. Más allá del Fondo Nacional de Desarrollo Regional y los demás fondos de decisión regional, las políticas públicas permiten que los Gobiernos Regionales puedan formar y ejecutar sus propios intereses para el desarrollo de la región.
Las políticas públicas son cruciales para un gobierno, ya que al orientar su gestión le permiten alcanzar sus objetivos. Y como se ha dicho en más de alguna oportunidad, quien quiere el gobierno, también requerirá de políticas públicas. [Lahera, 2002:34, 2004:8, 2008:48; Lira 2006:62]
Para un Gobierno, su tarea fundamental es la de gobernar una comunidad política, ya sea un país o una región. El modo como un gobierno desea gobernar, determina de manera significativa el devenir de una sociedad. Los gobiernos intervienen sobre la realidad a través de la acción pública con cierta intencionalidad [Moran, Rein y Goodin, Rein y Moran, 2008:3] ya sea para modificarla o para intentar mantener el status quo. El “qué hace” y “cómo lo hace un gobierno para intervenir sobre una determinada realidad reconoce varios instrumentos o mecanismos, siendo uno de los fundamentales las políticas públicas. Estas representan la realización concreta de las decisiones o mandatos de los gobiernos. De este modo, la relación que se da entre el gobierno y la sociedad se encuentra mediada por las políticas públicas. Esto porque una de sus características importantes es la participación ciudadana.
La construcción de una agenda pública que dé cuenta de las prioridades de ciertos temas percibidos como problemas por la ciudadanía y los distintos actores, es una condición importante para la gobernabilidad, el buen gobierno y la formulación de políticas públicas orientadas a resolverlos [Tomassini, 1998:34,55,57].
Los gobiernos al hacerse cargo constitucional y políticamente de muchos de los problemas sociales y económicos que afectan a los individuos y grupos sociales han tenido que desplazar el énfasis desde la “política” propiamente tal, hacia el eje de la “políticas públicas”.
Las problemáticas, como cuadros sintomáticos de las necesidades sociales, demandan una solución por parte de los gobiernos. Es en este contexto que las políticas públicas recobran una renovada importancia [Aguilar, 1996b:46]. En última instancia la “política, se ha sostenido, consiste en determinar quién obtiene qué cosa, cuándo y cómo, [Roth2007:71; Agilar, 1996b:44] a partir de las políticas públicas. Sin embargo, sería un error asumir que “política” es lo mismo que políticas públicas” ya que se trata de cuestiones muy distintas. La política es un concepto, a diferencia de las políticas públicas, más relacionado con el tema del poder (y de su uso legítimo) en la sociedad. Sin embargo, las políticas públicas, por su parte, son un instrumento (de planificación) de buen gobierno, de los asuntos públicos y la resolución de problemáticas sentidas en una sociedad. De aquí se desprende que otro error frecuente consiste en entender que la política pública es cualquier acción del gobierno. Basado en las referencias de los autores Eugenio Lahera y Peter J. May podemos esbozar un concepto unificado de política pública como cursos de acción para abordar los problemas o para proporcionar los bienes y servicios a la sociedad como objeto público definido de forma democrática desarrollado por el sector público. Suelen contener un conjunto de intenciones de objetivos, una mezcla de instrumentos o medios para soluciones específicas de cómo resolver los asuntos públicos. Es por ello que las políticas públicas como instrumento de planificación, también contiene a nuestro entender los componentes básicos del nivel estratégico: fin, visión, misión, objetivos que los sustentas, metas que controlar e indicadores. Por eso, que de las políticas públicas se desprenden los programas y proyectos que encarnará la voluntad política del gobierno. Una política pública existe siempre y cuando instituciones estatales asuman total o parcialmente la tarea de alcanzar objetivos estimados como deseables o necesarios, por medio de un proceso destinado a cambiar un estado de cosas percibido como problemático.
Un ejemplo de determinación gubernamental respecto a las políticas públicas es la Región de los Ríos, creada e instalada como región en la misma época de Arica y Parinacota. Basada en una bien elaborada estrategia regional, la Región de los Ríos definió 19 política públicas: salud; educación y fortalecimiento del capital humano; desarrollo cultural e identidad regional; para el mundo indígena; igualdad de oportunidades; política regional de deportes; participación ciudadana, desarrollo portuario, infraestructura y transporte; política regional energética; del agua; del medio ambiente; del desarrollo de las empresas de menor tamaño; de desarrollo del sector silvoagropecuario; de desarrollo rural; de desarrollo pesquero; de ciencia, tecnología e innovación, de desarrollo de la industria; de gestión y cooperación internacional y la política regional de turismo. Y fue precisamente esta, la primera política pública a ser elaborada para la región. El turismo para esta región, representa un sector importante y con un enorme potencial de desarrollo.
Para la Región de Arica y Parinacota, la política regional de turismo representará un avance significativo en la orientación de recursos y la resolución de problemas que estén dentro del ámbito de competencias del gobierno regional y su capacidad de implementarlos. La política pública no se limita a un estudio, tampoco compite con otros instrumentos de planificación regional, más bien se complementa para fundamentar las decisiones de inversión pública. Y su implementación dependerá del consenso entre los actores y la voluntad política del gobierno regional en su conjunto.
_______________________________________________________________________________________
Iván Godoy Flores es consultor de empresas y gobierno. Es Director Ejecutivo de G. Liaison Consultoría y Gerente General de Hub Chile Ltda. Asesoró a la Subsecretaria de Desarrollo Regional y Administrativo en la Instalación de la Región de Arica y Parinacota en materias de Participación Ciudadana y Promoción Territorial.
